Crystal City

La Ciudad de Cristal: Un Refugio de Sueños y Realidades

La canción 'Crystal City' de Junko Ohashi nos transporta a una metrópolis vibrante y multifacética, donde la vida urbana se despliega en un caleidoscopio de experiencias y emociones. La letra comienza describiendo un cielo azul grisáceo y las constelaciones que desaparecen con el amanecer, simbolizando el inicio de un nuevo día lleno de posibilidades. La mención del olor a tinta de un periódico recién impreso y las noticias que aún parecen somnolientas sugieren una ciudad que nunca duerme, siempre en movimiento y en constante renovación.

La ciudad, descrita como un corte brillante, refleja la diversidad de rostros y vidas que la habitan. Cada faceta de esta 'Crystal City' brilla con su propia luz, contribuyendo al resplandor colectivo. Desde los restaurantes en el piso 50 hasta los artistas en los oscuros sótanos, todos comparten el mismo amanecer, un recordatorio de la igualdad fundamental en medio de la diversidad. La ciudad, con su capacidad de absorber y reflejar todas las vidas que la componen, se convierte en un símbolo de aceptación y continuidad.

La canción también toca temas de búsqueda y anhelo. La repetición de 'Let me fly' sugiere un deseo de libertad y exploración, de encontrar algo invisible pero esencial. La ciudad, con su 'cinta de luz' y su ritmo ligero, ofrece un escenario donde los días pasan rápidamente, pero cada momento de brillo es suficiente para mantener la esperanza y la ilusión. 'Crystal City' es un lugar que siempre espera, un refugio constante en un mundo en perpetuo cambio, donde cada día trae nuevas oportunidades y encuentros.