Escribo

La Escritura como Refugio: Un Análisis de 'Escribo' de Txus Di Fellatio

La canción 'Escribo' de Txus Di Fellatio es una profunda reflexión sobre el poder terapéutico de la escritura. Desde el primer verso, el autor nos introduce en un mundo donde la escritura se convierte en una herramienta para mantener a raya la amargura. La metáfora de 'esquivar dardos con palabras' sugiere que la escritura no solo es un acto creativo, sino también un mecanismo de defensa contra las adversidades emocionales. La armadura de palabras que menciona es una representación de cómo el lenguaje puede protegernos de los ataques de la vida, permitiéndonos expresar lo que sentimos sin necesidad de recurrir a la confrontación directa.

El estribillo 'Escribo, esquivo y callo' encapsula la esencia de la canción. Txus Di Fellatio nos muestra que a veces el silencio puede ser más elocuente que las palabras, y que las lágrimas derramadas en un folio son una forma de liberar el dolor interno. La tinta se convierte en un símbolo de las emociones que no pueden ser expresadas de otra manera, y el poema se erige como un ataque contra el olvido y la pena. La escritura, en este contexto, es una forma de inmortalizar los sentimientos y de luchar contra la indiferencia del mundo.

En la segunda estrofa, el autor profundiza en la idea de la escritura como un medio para sanar. 'Escribo para curar mi alma rota' es una declaración poderosa que resuena con cualquiera que haya encontrado consuelo en el acto de escribir. Gritar para que el silencio no lo atrape y curar sus heridas con versos son imágenes que refuerzan la idea de que la escritura es una forma de catarsis. La hoja de papel se convierte en un confidente silencioso, un lugar donde los miedos y las penas pueden ser llorados y, eventualmente, superados. La canción concluye con la afirmación de que escribir es una manera de mantener a distancia la locura, subrayando la importancia de la escritura como un refugio emocional y mental.