No hay palabras

La Inefabilidad de la Grandeza Divina en 'No hay palabras' de Lilly Goodman

La canción 'No hay palabras' de Lilly Goodman es una profunda reflexión sobre la inefabilidad de la grandeza divina. A través de su letra, Goodman expresa la dificultad de encontrar palabras, música o cualquier forma de expresión que pueda capturar la magnitud de la gloria y majestad de Dios. La búsqueda entre papeles, libros y diccionarios simboliza el esfuerzo humano por comprender y describir lo divino, un esfuerzo que, según la canción, siempre resulta insuficiente.

La repetición de frases como 'No hay palabras, no hay música' y 'No hay conceptos, ni instrumentos' subraya la idea de que la grandeza de Dios trasciende cualquier intento humano de descripción. Esta inefabilidad se convierte en un tema central, destacando la humildad y reverencia que siente el ser humano ante la presencia divina. La letra también menciona la caída ante Dios y el canto, lo que sugiere una rendición total y una adoración que va más allá de las palabras y se manifiesta en actos de devoción y alabanza.

Lilly Goodman, conocida por su estilo de música cristiana contemporánea, utiliza su voz y talento para transmitir un mensaje de adoración y reverencia. Su música a menudo se centra en temas de fe, esperanza y amor divino, y 'No hay palabras' no es una excepción. La canción invita a los oyentes a reconocer la limitación de las palabras humanas y a experimentar la presencia de Dios de una manera más profunda y espiritual, más allá de lo que se puede expresar con el lenguaje.