Condenado

Condenado: Un Grito de Rebeldía y Desencanto

La canción 'Condenado' de La 25 es un reflejo crudo y sincero de la realidad de muchos jóvenes que se sienten atrapados en un destino que no eligieron. La letra comienza con una sensación de incertidumbre y desorientación, 'Tengo que bajarme, y no sé dónde voy', lo que sugiere una búsqueda constante de identidad y propósito en un mundo que parece no ofrecer respuestas claras. Esta sensación de estar perdido es una metáfora de la vida misma, donde las decisiones y el camino a seguir no siempre son evidentes.

El estribillo 'Condenado a ser lo que nunca quisiste, nunca debiste ser' resuena como un lamento de aquellos que se ven obligados a conformarse con roles y expectativas impuestas por la sociedad. La referencia a 'la pilcha del barrio' que 'te queda bien pero te piden más' habla de la presión social y la lucha por encajar en un entorno que constantemente demanda más de uno, sin valorar la autenticidad y la individualidad. La canción critica a aquellos que, desde la comodidad de sus pantallas, juzgan sin comprender la verdadera esencia de la vida y las luchas de los demás.

La 25 también aborda la pérdida de una generación y el desencanto con el mundo actual, 'Una generación se fue perdiendo, la historia dice que el mundo se vuelve miserias'. Sin embargo, a pesar del tono pesimista, hay una chispa de esperanza en la letra, 'Ya llegarán a brillar futuros buenos tiempos'. Esta dualidad entre el desencanto y la esperanza es una característica distintiva del rock, que busca no solo reflejar la realidad, sino también inspirar un cambio. La canción es un llamado a la reflexión sobre el rumbo de nuestras vidas y la importancia de luchar por un futuro mejor, a pesar de las adversidades y las condenas impuestas por la sociedad.