Canto Del Agua

El Encanto del Agua y el Amor en 'Canto Del Agua' de Isabel Parra

La canción 'Canto Del Agua' de Isabel Parra es una hermosa y poética representación de la conexión entre la naturaleza y el amor. Isabel Parra, una destacada figura de la Nueva Canción Chilena, utiliza en esta pieza una serie de metáforas y simbolismos que evocan la frescura del agua y la calidez del amor. La letra nos transporta a un escenario natural, donde el río y el mar se convierten en testigos y cómplices de un romance profundo y sincero.

El uso de la expresión 'Soy un canto mañanero' sugiere un despertar, una renovación diaria que se alinea con la frescura del agua en la mañana. La referencia al 'negro' puede interpretarse como una forma cariñosa de dirigirse a un ser querido, alguien con quien se comparte una intimidad especial. La petición de 'tápame que tengo frío' y 'vámonos a enamorar' refleja la dualidad de la necesidad de protección y el deseo de compartir momentos de amor y pasión.

La repetición del 'ay, ay, ay' en el estribillo añade un tono de lamento y anhelo, intensificando la emoción de la canción. La mención de la luna y las dunas sugiere un ambiente nocturno y romántico, donde los amantes buscan refugio en la naturaleza. La frase 'préstame, negro, tus ojos' indica una profunda confianza y dependencia emocional, mientras que 'lo que me pide mi negro no se lo puedo negar' muestra una entrega total al ser amado. En conjunto, 'Canto Del Agua' es una celebración del amor y la naturaleza, donde ambos elementos se entrelazan para crear una experiencia emocionalmente rica y evocadora.