Guri Pescador

El Reino Bajo el Agua: Un Viaje a Través de 'Guri Pescador' de Giselle Graside

La canción 'Guri Pescador' de Giselle Graside nos transporta a un mundo mágico y sereno, donde la naturaleza y la vida acuática se entrelazan con la experiencia humana. Desde el inicio, la letra nos introduce a un 'reino bajo el agua', un lugar casi mítico donde los peces no solo existen, sino que también escuchan y cantan. Este reino es revelado por un sauce, un árbol que a menudo simboliza la sabiduría y la conexión con la naturaleza. La imagen del 'bagre cantor' y el 'pejerrey que escucha' añade un toque de fantasía y poesía, sugiriendo que este mundo subacuático tiene su propio lenguaje y melodía.

El personaje central de la canción es un 'gurí pescador', un joven que ha aprendido a entender y comunicarse con este reino acuático. A través de su canto, el gurí no solo pesca, sino que también se conecta con las criaturas del agua. La tararira, un pez conocido por su astucia, se convierte en un símbolo de la naturaleza esquiva y sabia. La repetición de 'Tararira, tararira' en el estribillo refuerza esta conexión y añade un ritmo hipnótico a la canción. La letra también menciona la 'plata viva del juncal', una metáfora que evoca la belleza y el brillo de los peces en su hábitat natural.

La canción también refleja una profunda conexión personal del narrador con el entorno natural. Creciendo 'bajo los sauces del yi', el narrador se identifica con el gurí pescador y su relación con la naturaleza. A pesar de que la suerte con los peces siempre ha sido esquiva para él, las coplas del gurí le ofrecen una luz, un 'candil' que ilumina su camino. Esta conexión entre el ser humano y la naturaleza, mediada por la música y la poesía, es el corazón de 'Guri Pescador'. La canción nos invita a apreciar la sabiduría y la belleza del mundo natural, y a encontrar en él una fuente de inspiración y consuelo.