Al Sol Del Mediodía

El Calor del Periférico: Una Odisea Urbana

La canción 'Al Sol Del Mediodía' de Fernando Delgadillo es una vívida descripción de la experiencia de estar atrapado en el tráfico de la Ciudad de México durante un caluroso día de abril. A través de una serie de metáforas y comparaciones, Delgadillo transforma la rutina diaria de estar en el periférico en una odisea urbana que recuerda a los cuentos de Las Mil y Una Noches. El sol abrasador y el tráfico interminable se convierten en un desierto oriental, con los carros como una caravana y los conductores como personajes misteriosos de un bazar exótico.

El uso de imágenes del Medio Oriente, como Alí Babá, camellos y mercaderes, sirve para enfatizar la sensación de calor extremo y la monotonía del tráfico. La locutora de radio que menciona el calor y los espejismos que el protagonista experimenta, como postes que se convierten en palmeras y calles que parecen dunas de arena, añaden una capa de surrealismo a la experiencia. Esta transformación del entorno urbano en un paisaje casi mítico subraya la desesperación y el agotamiento que siente el protagonista.

Además, la canción también toca temas de la vida cotidiana y la economía informal, con referencias a los vendedores ambulantes que ofrecen mercancías y contrabando. Esta mezcla de lo mundano y lo exótico crea una narrativa rica y multifacética que captura la esencia de la vida en una gran ciudad. La repetición del estribillo '¡Ay! hermano, hermano que calor' refuerza la sensación de agobio y la lucha por soportar las condiciones adversas del tráfico y el clima.

En última instancia, 'Al Sol Del Mediodía' es una reflexión poética sobre la vida urbana, el calor y la resiliencia humana. A través de su letra, Fernando Delgadillo logra convertir una experiencia común en una aventura épica, llena de imágenes evocadoras y sentimientos universales.