El Canelazo

El Canelazo: Un Brindis para Olvidar el Dolor

La canción 'El Canelazo' de Chimizapagua es una oda a la bebida tradicional ecuatoriana del mismo nombre, utilizada aquí como un medio para escapar temporalmente del dolor y la soledad. La letra comienza con una petición a una señora para que abra la puerta y sirva un 'canelacito', una bebida caliente hecha con aguardiente y canela, popular en las regiones andinas. La repetición de 'deme unito, deme otrico' sugiere un deseo de continuar bebiendo hasta alcanzar un estado de embriaguez, reflejado en la palabra 'chumadito', que en el contexto ecuatoriano significa estar borracho.

El estribillo 'Abra la puerta por favor, quiero olvidar lo que es dolor' revela el motivo detrás de la ingesta de alcohol: el deseo de olvidar el sufrimiento. La frase 'que estoy chumado y qué caray, ya voy entrando en humor' indica una aceptación resignada de la embriaguez como una forma de encontrar alivio temporal y buen humor, aunque sea efímero. La canción captura la dualidad de la embriaguez: por un lado, proporciona un escape momentáneo y una sensación de alegría, pero por otro, es una solución temporal que no resuelve el problema subyacente.

En la segunda estrofa, el cantante expresa su intención de pasar la noche junto a su 'longa', una palabra que en el contexto ecuatoriano puede referirse cariñosamente a una mujer. Sin embargo, anticipa que al día siguiente volverá a enfrentar su soledad y amargura. Esta anticipación de la tristeza futura subraya la naturaleza transitoria del alivio que proporciona el alcohol. La canción, por lo tanto, no solo celebra la bebida tradicional, sino que también ofrece una reflexión sobre el uso del alcohol como un mecanismo de afrontamiento para el dolor emocional.