Final de Seca

Prás bandas do poente, ergueu-se uma barra
Calou-se a cigarra, assim de repente
E um som diferente, ponteou de guitarra

Lá longe bem longe, faísca e troveja
Silêncio de igreja, com ecos de bronze
Nas preces do monge, no amém do assim seja

(Tropeando a lonjura, o tempo que berra
Farejo mais serra que o vento procura
E a chuva madura traz cheiro de terra
E a chuva madura traz cheiro de terra

O tempo desaba, o mundo se adoça
Na água que empoça, mais mansa ou mais braba
A seca se acaba, e tudo remoça
A seca se acaba, e tudo remoça)

Nas almas sedentas, não é diferente
As barras do poente, que se erguem violentas
Depois das tormentas, acalmam a gente

Se as safras perdidas, tivessem gargantas
Podiam ser santas, da searas da vida
São tão parecidas, as almas e as plantas

A seca se acaba, e tudo remoça
A seca se acaba, e tudo remoça

Fin de la sequía

Para las bandas del oeste, un bar rosa
La cigarra se calló, de repente
Y un sonido diferente, con punta de guitarra

Lejos, chispas y truenos
El silencio de la iglesia, con ecos de bronce
En las oraciones del monje, en el amén de así ser

(Tropezando el largo, el tiempo que grita
Huelo más sierra de lo que el viento está buscando
Y la lluvia madura trae el olor de la tierra
Y la lluvia madura trae el olor de la tierra

El tiempo se derrumba, el mundo endulza
En el agua que mestiza, doma o brabier
La sequía ha terminado, y todo se elimina
La sequía ha terminado, y todo se elimina)

En almas sedientas, no es diferente
Los barrotes del oeste, que se elevan violentos
Después de las tormentas, nos calman

Si las añadas perdidas tuvieran gargantas
Podrían ser santos, de los cultivos de la vida
Son tan parecidos, almas y plantas

La sequía ha terminado, y todo se elimina
La sequía ha terminado, y todo se elimina

Composição: Jayme Caetano Braum / Luiz Marenco