La Murga de La Virgencita

La Murga de la Esperanza Perdida: Un Análisis de 'La Murga de La Virgencita'

La canción 'La Murga de La Virgencita' de Los Redonditos de Ricota, banda icónica del rock argentino, es una narrativa cruda que retrata la vida de una mujer, Marita, que se ve obligada a prostituirse para sobrevivir. La letra describe con metáforas y un lenguaje directo la dura realidad de su entorno y la crueldad de la sociedad que la rodea. La mención a 'su comparsa siempre es cruel' sugiere que las personas en su vida, en lugar de apoyarla, son parte de su sufrimiento y desdicha.

La 'murga de la virgencita' puede interpretarse como una representación de la vida de Marita, llena de contrastes entre lo sagrado y lo profano, lo dulce y lo amargo. La murga, que tradicionalmente es una celebración, aquí se convierte en un símbolo de la lucha y el dolor de la protagonista. La virgencita, que podría ser vista como un símbolo de pureza, en este contexto, parece ser una figura irónica o una esperanza inalcanzable para Marita. La canción también aborda la deshumanización que sufre Marita, reflejada en la línea 'Nunca pudo comer del queso / Sin que la trampera la aplaste', que sugiere que cualquier intento de mejorar su situación es inútil.

Finalmente, la canción toca temas de desesperación y resignación, pero también de resistencia. Marita se maquilla 'para el túnel del amor' y 'para su tren fantasma', metáforas de sus encuentros sexuales que son a la vez su medio de subsistencia y su condena. La figura de Dios tocando el tambor puede interpretar la indiferencia del destino o la sociedad hacia su sufrimiento. La canción termina con una imagen de Marita como una 'polilla en busca de la luz', una metáfora de la búsqueda de la felicidad o la salvación, a pesar de las adversidades.