Fado Da Pouca Sorte

De manhã a vender na Avenida,
ou à tarde nas ruas da Baixa
está o cauteleiro
a gritar que há horas na vida
à carteira de que não tem
pão porque não tem dinheiro.
Tantos contos que são a taluda,
tantas notas sonhadas só ele
as atira p'ra o ar.
Já que a sorte da gente não muda,
que tristeza termos de pensar
isto vai a jogar.

Quinze mil quatrocentos e tres.
Nove mil trezentos e dez.
Mas o mal que o dinheiro nos fez
durante a vida toda...
Amanhã não anda a roda!

Um bilhete que sabe a desgraça,
uma vida passada à espera da terminação.
Mas o cauteleiro é que passa,
a má sorte jogada no duro da aproximação.
A voz lenta apregoa a cautela,
esperança louca de quem nunca teve
uma nota na mão.
Mas a sorte também tem com ela
a miséria de quem fez do jogo
o seu ganha-pão.

Quinze mil quatrocentos e tres.
Nove mil trezentos e dez.
Mas o mal que o dinheiro
nos fez durante a vida toda...
Amanhã não anda a roda!

Fado de Little Suerte

Por la mañana vendiendo en Avenida
o por la tarde en las calles de Baixa
es la advertencia
gritando que hay horas en la vida
a la cartera que no tiene
pan porque no tiene dinero
Tantos cuentos que son la pendiente
tantas notas soñó sólo él
Tíralos al aire
Como nuestra suerte no cambia
Qué tristeza tenemos que pensar
Esto va a jugar

Quince mil cuatrocientos tres
Nueve mil trescientos diez
Pero el dinero malo nos ha hecho
toda tu vida
¡Mañana la rueda no corre!

Una nota que sabe a la vergüenza
una vida que se ha pasado esperando la terminación
Pero la advertencia es la que pasa
la mala suerte jugó en el duro del enfoque
La voz lenta proclama la precaución
loca esperanza de aquellos que nunca tuvieron
una nota en la mano
Pero la suerte tiene con ella, también
la miseria de los que hicieron el juego
tu sustento

Quince mil cuatrocientos tres
Nueve mil trescientos diez
Pero el mal que el dinero
nos ha hecho toda la vida
¡Mañana la rueda no corre!

Composição: