Oh Jah, Oh Jah!
Destinos livres num mundo em degradação
Mentes mantidas na prisão,
Dos falsos preceitos, da doutrinação,
Excluídos e eleitos no reino da perdição.
Líderes malignos, dominadores,
Ensinam e fanatizam seus fiéis seguidores,
Não sabem da dor no desprezo, da rejeição,
Não sabem do desespero dos que esperam em vão.
Falsos profetas, enganadores,
Comerciantes da fé, sacerdotes dos valores,
Missionários mercenários, devotos do dinheiro,
Exploram nos cultos diários o sofrimento alheio.
Oh Jah, Oh Jah-Jah! Quanta desonestidade,
Não se sabe em que acreditar,
Doutores em falsidade,
Aproveitadores por todo lugar,
Querem construir o seu céu na Terra
E acham que pra isso tudo podem comprar,
Vendem suas almas, declaram a guerra,
Só a cobiça lhe faz respirar.
Oh Jah, Oh Jah-Jah,
Que grande abominação!
Oh Jah, Oh Jah-Jah,
Discipulos da maldição!
Oh Jah, Oh Jah-Jah,
Quanta hipocrisia!
Oh Jah, Oh Jah-Jah,
Livrai-me dessa heresia!
Não se sabe em quem acreditar,
Perdoe se eu tropeçar,
Mundo em degeneração,
Eu clamo pelo Seu perdão.
¡Oh Jah, oh Jah!
Destinos libres en un mundo en degradación
Las mentes mantenidas en la cárcel
De falsos preceptos, de adoctrinación
Excluidos y elegidos en el reino de la perdición
Líderes malvados, dominadores
Enseñan y fanatizan a sus fieles seguidores
Ellos no conocen el dolor en el desprecio, el rechazo
Ellos no conocen la desesperación de aquellos que esperan en vano
Falsos profetas, engañadores
Comerciantes de la fe, sacerdotes de valores
Misioneros mercenarios, devotos del dinero
Explotan en los servicios cotidianos el sufrimiento de los demás
Oh Jah, oh Jah-Jah! ¿Cuánta deshonesta
No se sabe qué creer
Los médicos en falsedad
Se ahoga por todo el lugar
Quieren construir su cielo en la Tierra
Y crees que todo lo que puedes comprar es por esto
Venden sus almas, declaran la guerra
Sólo la codicia te hace respirar
Oh Jah, oh Jah-Jah
¡Qué gran abominación!
Oh Jah, oh Jah-Jah
¡Discípulos de la maldicion!
Oh Jah, oh Jah-Jah
¡Qué hipocresía!
Oh Jah, oh Jah-Jah
¡Líbrame de esta herejía!
No sabes a quién creer
Perdóname si me tropiezo
El mundo de la degeneración
Lloro por Su perdón