O Navio Negreiro/Um índio

O Navio Negreiro/Um índio

Era um sonho dantesco... o tombadilho,

Tinir de ferros... estalar do açoite...
Legiões de homens negros como a noite,
Horrendos a dançar...

Negras mulheres, levantando às tetas
Magras crianças, cujas bocas pretas
Rega o sangue das mães:
Outras, moças... mas nuas, assustadas,
No turbilhão de espectros arrastadas,
Em ânsia e mágoa vãs.

Um de raiva delira, outro enlouquece...
Outro, que de martírios embrutece,
chora e dança, ali.

Senhor Deus dos desgraçados!
Dizei-me vós, Senhor Deus!
Se é loucura... se é verdade
Tanto horror perante os céus...

Quem são estes desgraçados
Que não encontram em vós
Mais que o rir calmo da turba

Dize-o tu, severa musa,
Musa libérrima, audaz!

São os filhos do deserto
Onde a terra esposa a luz.
Onde voa em campo aberto
A tribo dos homens nus...

São os guerreiros ousados,
Que com os tigres mosqueados
Combatem na solidão...
Homens simples, fortes, bravos...
Hoje míseros escravos
Sem ar, sem luz, sem razão...

Lá nas areias infindas,
Das palmeiras no país,
Nasceram crianças lindas,
Viveram moças gentis...
Passa um dia a caravana
Quando a virgem na cabana
Cisma das noites nos véus...
...Adeus! ó choça do monte!...
...Adeus! palmeiras da fonte!...
...Adeus! amores... adeus!...

Senhor Deus dos desgraçados!
Dizei-me vós, Senhor Deus!
Se é loucura... se é verdade
Tanto horror perante os céus...

Ó mar, por que não apagas
de tuas vagas
De teu manto este borrão?
Astros! noite! tempestades!
Rolai das imensidades!
Varrei os mares, tufão!...

E existe um povo que a bandeira empresta
P'ra cobrir tanta infâmia e covardia!...
E deixa-a transformar-se nessa festa
Em manto impuro de bacante fria!...
Meu Deus! meu Deus! mas que bandeira é esta,
Que impudente na gávea tripudia?!...

Auriverde pendão de minha terra,
Que a brisa do Brasil beija e balança,

Antes te houvessem roto na batalha,
Que servires a um povo de mortalha!...

...Mas é infâmia demais...
Da etérea plaga
Levantai-vos, heróis do Novo Mundo...
Andrada! arranca este pendão dos ares!
Colombo! fecha a porta de teus mares!
......

Um índio descerá de uma estrela colorida, brilhante
De uma estrela que virá numa velocidade estonteante
E pousará no coração do hemisfério sul
Na América, num claro instante
Depois de exterminada a última nação indígena
E o espírito dos pássaros das fontes de água límpida
Mais avançado que a mais avançada das mais avançadas
das tecnologias

Virá impávido que nem Muhammad Ali
Virá que eu vi, apaixonadamente como Peri
Virá que eu vi, tranqüilo e infálivel como Bruce Lee
Virá que eu vi, o axé do afoxé Filhos de Gandhi
Virá

Um índio preservado em pleno corpo físico
Em todo sólido, todo gás e todo líquido
Em átomos, palavras, alma, cor
Em gesto, em cheiro, em sombra, em luz, em som
magnífico
Num ponto equidistante entre o Atlântico e o Pacífico
Do objeto-sim resplandecente descerá o índio
E as coisas que eu sei que ele dirá, fará
Não sei dizer assim de um modo explícito

Virá impávido que nem Muhammad Ali
Virá que eu vi, apaixonadamente como Peri
Virá que eu vi, tranqüilo e infálivel como Bruce Lee
Virá que eu vi, o axé do afoxé Filhos de Gandhi
Virá

E aquilo que nesse momento se revelará aos povos
Surpreenderá a todos não por ser exótico
Mas pelo fato de poder ter sempre estado oculto
Quando terá sido o óbvio.
Virá

El Negro/Un indio

El Negro/Un indio

Era un sueño dantesco... la tumba

Jingle en hierros... chasquido del látigo
Legiones de hombres negros como la noche
Horrible baile

Mujeres negras, levantando a sus pezones
Niños flacos cuyas bocas negras
Riego de la sangre de las madres
Otros, damas... pero desnudas, asustadas
En el torbellino de espectros arrastrados
En vano anhelo y tristeza

Uno de la rabia se pone furioso, uno se vuelve loco
Otro, que brutalmente mártires
llantos y bailes, allá

¡Señor Dios de los bastardos!
¡Dime, Señor Dios!
Si es una locura... si es verdad
Tal horror ante los cielos

¿Quiénes son estos bastardos?
¿Quién no encuentra en ti
Más que la risa tranquila de la mafia

Tú lo dices, muslo severo
¡Musa liberal, atrevida!

Son los hijos del desierto
Donde la tierra esposa la luz
Donde vuelas al aire libre
La tribu de hombres desnudos

Son los valientes guerreros
Que con los tigres moteados
Luchan en soledad
Hombres simples, fuertes, valientes
Hoy miserables esclavos
Sin aire, sin luz, sin razón

Allá afuera, en las interminables arenas
Desde las palmeras del país
Nacieron hermosos niños
Vivían chicas suaves
Pasa un día en la caravana
Cuando la virgen en la cabaña
El cisma de las noches en los velos
¡Adiós! ¡Oh choza de montaña!
¡Adiós! palmeras de la fuente!
¡Adiós! ama... adiós!

¡Señor Dios de los bastardos!
¡Dime, Señor Dios!
Si es una locura... si es verdad
Tal horror ante los cielos

Oh mar, ¿por qué no lo apagas?
de sus vacantes
¿De tu capa esta borrosa?
¡Estrellas! ¡Buenas noches! ¡Tormentas!
¡Ruede de la inmensidad!
¡He barrido los mares, tifón!

Y hay una gente que la bandera presta
¡Para cubrir tanta infamia y cobardía!
Y dejar que se convierta en esa fiesta
¡Con una capa impura de bacchae frías!
¡Oh, Dios mío! ¡Oh! ¡Oh, Dios mío! pero qué bandera es esta
¿Qué insolente en el heno tripudia?!

Colgante Auriverde de mi tierra
Que la brisa de Brasil besa y columpia

Antes de que te hubieran destrozado en la batalla
¡Que sirvas a un pueblo de sudario!

pero es demasiado infame
De la plaga etérea
Levántate, héroes del Nuevo Mundo
¡Andrada! ¡Saca este colgante del aire!
¡Colón! ¡Cierra la puerta de tus mares!
¿Qué?

Un indio descenderá de una estrella brillante y colorida
De una estrella que vendrá a una velocidad impresionante
Y aterrizará en el corazón del hemisferio sur
En Estados Unidos, en un claro instante
Después de exterminar a la última nación india
Y el espíritu de las aves de las fuentes de agua clara
Más avanzado que el más avanzado de los más avanzados
tecnología

Vendrá sin pavimentar como Muhammad Ali
Vendrá que vi, apasionadamente como Peri
Vendrá que vi, tranquilo e infalible como Bruce Lee
Vendrá que vi, el hacha de los Afoxé Hijos de Gandhi
Vendrá

Un indio preservado en cuerpo físico completo
En cada sólido, cada gas y cada líquido
En átomos, palabras, alma, color
En gesto, en olor, en sombra, en luz, en sonido
magnífico
En un punto equidistante entre el Atlántico y el Pacífico
Desde el resplandeciente objeto-sí descenderá el indio
Y las cosas que sé que dirá, hará
No puedo decirlo de esa manera de una manera explícita

Vendrá sin pavimentar como Muhammad Ali
Vendrá que vi, apasionadamente como Peri
Vendrá que vi, tranquilo e infalible como Bruce Lee
Vendrá que vi, el hacha de los Afoxé Hijos de Gandhi
Vendrá

Y lo que en ese momento se revelará a los pueblos
Sorprende a todos, no porque sea exótico
Pero por el hecho de que siempre podría haber estado oculto
¿Cuándo fue lo obvio?
Vendrá

Composição: Caetano Veloso