Saudade de Mãe
Coloquei o filtro da arte naquela cena comum, e a luz - que
até então estava escondida -, veio surpreender-me com seu
poder de claridade.
A mulher simples, mãos calejadas de lida rotineira,
mulher que aprendeu a curar as dores do mundo
a partir de meus joelhos esfolados de quedas e estrepolias.
Aquela mulher, minha mãe, rosto iluminado pela labareda que tinha origem no fogão de lenha. Trazia consigo o dom de me
devolver a calma, que a vida tantas vezes insistiu em me roubar.
Aquela cena: mulher, fogão de lenha, panela preta escondendo a brancura de um arroz feito na hora. É uma das cenas mais preciosas que meu coração não soube esquecer.
Saudade de mãe é coisa sem jeito, chega quando menos
imaginamos: um cheiro, uma melodia, uma palavra... uma
imagem, e eis que o cordão do tempo,
nos convida ao retorno da infância.
Como se um fio nos costurasse de novo ao colo da mulher que primeiro nos segurou na vida e agora nos pudesse regenerar.
Saudade de mãe é ponte que nos favorece um retorno a nós mesmos;
travessia que borda uma identidade muitas vezes esquecida,
perdida na pressa que nos leva.
Saudade de mãe é devolução, é ato que restitui o que se parte;
é luz que sinaliza o local do porto,
é voz no ouvido a nos acalmar nas madrugadas de desespero e solidão,
através de uma frase simples: Dorme meu filho! Dorme!
Hoje, nesse dia em que a vida me fez criança de novo,
neste instante em que esta cena feliz tomou conta de mim,
uma única palavra eu quero dizer: Oh minha mãe, que saudade eu sinto de você!
Madre desaparecida
Puse el filtro de arte en esa escena común, y la luz - que
hasta entonces estaba oculto - vino a sorprenderme con su
poder de claridad
La mujer simple, las manos callosas de las manos rutinarias
mujer que aprendió a curar los dolores del mundo
de mis rodillas desoladas de caídas y trepolias
Esa mujer, mi madre, la cara iluminada por la llama que se originó en la estufa de leña. Él trajo consigo el regalo de mí
devolver la calma, que la vida tan a menudo insistía en robarme
Esa escena: mujer, estufa de leña, olla negra escondiendo la blancura del arroz recién hecho. Es una de las escenas más preciosas que mi corazón no pudo olvidar
La nostalgia de una madre es una cosa desesperada, llega al menos
nos imaginamos: un olor, una melodía, una palabra... un
y he aquí, el cordón del tiempo
nos invita a regresar de la infancia
Como si un hilo nos cosiera de nuevo en el regazo de la mujer que primero nos abrazó en la vida y ahora podría regenerarnos
La nostalgia de la madre es un puente que nos favorece un retorno a nosotros mismos
que bordea una identidad a menudo olvidada
perdido en la prisa que nos lleva
La nostalgia de una madre es el retorno, es un acto que restaura lo que es parte
es la luz que indica la ubicación del puerto
es la voz en el oído que nos calma en los albores de la desesperación y la soledad
a través de una simple frase: Duerme mi hijo! ¡Duérmete!
Hoy, en ese día en que la vida me convirtió en un niño de nuevo
en este momento en que esta feliz escena se ha apoderado de mí
una sola palabra quiero decir: Oh mi madre, cuánto te echo de menos!